La política una forma de servicio a la sociedad y de realización personal

Michoacán.- La política debe tener sentido y trascendencia, la palabra, su principal medio, debe ser siempre el llamado a los valores que enaltecen a la persona y a la sociedad, de esta forma la contienda política y electoral debe dejar una enseñanza que, proporcionando conocimientos y propuestas programáticas, se identifiquen con las expresiones ideológicas.
La política es la oportunidad para que las personas alcancen su plenitud ciudadana, los debates deben ser el análisis de las propuestas, planteando el qué y el cómo para compartir y sustentar los cambios que demanda la sociedad, así esta acción ciudadana es una especie de escuela en donde se contrastan las diversas voces y las diversas visiones y propuestas.
En la política, sobre todo en un sistema democrático, debatir y confrontar debe ser siempre a partir de una realidad; no vernos como enemigos que buscan destruirse, sino como adversarios que desean el bienestar social por medios distintos, de esta forma la elección es la forma de consultar a la ciudadanía que con el voto determina quién y que hay que hacer.
La sociedad actual tiene los medios idóneos para informarse y así decidir a quién le otorga su confianza, nunca entrega un cheque en blanco, su voto está condicionado al cumplimiento de la palabra, a la realización del programa, cuando esto no ocurre, el rechazo social se manifiesta y el sustento ciudadano se convierte en crítica.
Es muy importante que la acción política se realice con valores éticos de no ser así termina siendo una fuerza arbitraria que destruye y se degrada, alienta odios y promueve insultos con un maniqueísmo que solo se explica en los inicios de la edad media.
Política es acuerdo, dialogo, consenso, pero también tolerancia y respeto a los que piensan diferente para, en la suma ciudadana, buscar coincidencias que aumenten el respaldo social y de esta forma potenciar la capacidad transformadora del pueblo en beneficio de todos.
La política exige la palabra que alienta, la propuesta que entusiasma, el proyecto que suma y la respuesta estratégica para caminar con certidumbre en la construcción de un futuro diferente, de oportunidades y realizaciones, sin más límite que el esfuerzo y la preparación personal, con la conciencia de ser parte de un todo.
En la política hay el espacio generoso para sumar visiones y ampliar proyectos, quienes no entienden esto, aunque presuman de su aspiración democrática, en el fondo son intolerantes, excluyentes, autoritarios, que se sienten iluminados, dueños de la verdad revelada y autorizados para, en una estrategia populista, manipular a segmentos sociales dividiendo a la sociedad en buenos y malos.
En la política debe buscarse el encuentro, fortalecer los puntos y acciones que nos acerquen, construir alianzas a partir del respeto al derecho del otro y la coincidencia en la búsqueda del beneficio social para, juntos, fortalecer a la sociedad.
Nada más antidemocrático que pretender el sometimiento del otro (la otra), que humillar a quien piensa diferente, que acusar sin sustento al diferente y reprimir cualquier crítica, la política es palabra que forja personalidades, describe culturas, mentalidades, formas de ser y permite comprender, definir y compartir, sueños y aspiraciones en la búsqueda de la superación general para fortaleciendo nuestra fraternidad asegurar el camino a la justicia.
La persona adquiere su dimensión cuando dice no al caudillo que ordena y amenaza, que impone por la fuerza su capricho y su ocurrencia, al autoritario que en la demagogia se recrea para, distorsionando la democracia, corromper sus valores y engañar, con falsas promesas, promoviendo el odio y la división social bajo la ilusión de un regreso al pasado mítico que nunca existió.