Renuevan consejo de VIFAC en Morelia con llamados a fortalecer alianzas sociales y gubernamentales en favor de la vida

Morelia, Michoacán.– En un acto protocolario que reunió a representantes de instituciones civiles, religiosas y gubernamentales, la organización Vida y Familia A.C. (VIFAC) Morelia llevó a cabo la toma de protesta de su nuevo consejo directivo.
Durante el evento, se reiteró el compromiso de la institución con la atención y acompañamiento a mujeres embarazadas en situación de vulnerabilidad, en el marco de un modelo de trabajo centrado en la prevención y en la promoción de una cultura de protección a la vida desde sus etapas iniciales, cuyo consejo será ahora presidido por Bertha Ballesteros.
La ceremonia estuvo encabezada por Margarita Arreygue, directora general de VIFAC Morelia, quien continuará al frente de la asociación con el respaldo de un nuevo cuerpo colegiado integrado por diez consejeros. En su intervención, Arreygue destacó los desafíos operativos que ha enfrentado la organización, así como la necesidad de ampliar su impacto mediante una estructura más sólida y coordinada.
“Este lugar es un espacio de prevención. El trabajo con mujeres embarazadas, desde la contención hasta el acompañamiento, es clave para que los niños lleguen a este mundo con condiciones más favorables”, señaló.
Durante la sesión también se reconoció al consejo saliente, presidido por Luis Adolfo González, quien expresó su agradecimiento a los voluntarios, donantes y personal operativo que participaron durante su gestión. Destacó la importancia del apoyo espiritual, social y financiero recibido, que —dijo— permitió sostener la operación durante momentos complejos.
En el evento como invitado especial estuvo el arzobispo coadjutor de Morelia, Armando Álvarez Cano, quien planteó una reflexión crítica sobre el valor social de la vida en el contexto actual.
“En esta cultura de muerte, la vida ha perdido valor. Esta institución está tocando algo muy esencial del ser humano: la capacidad de acoger la vida y de generar esperanza desde lo concreto”, expresó.
Afirmó que acciones como las emprendidas por VIFAC constituyen una respuesta concreta frente a fenómenos como el aborto, la violencia y la indiferencia social. Subrayó que, aunque parezcan esfuerzos pequeños ante problemas de gran escala, su valor radica en atender una vida a la vez.
La representante del Sistema de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes (SIPINNA) en Michoacán, Daniela de los Santos, reconoció el papel que ha desempeñado VIFAC en la promoción del derecho de los menores a vivir en familia y destacó la trayectoria de la asociación como una de las más activas en el país en ese rubro.
“VIFAC ha sido una de las organizaciones más comprometidas en la defensa del derecho a vivir en familia. Desde SIPINNA reiteramos la disposición institucional para colaborar y facilitar su trabajo”, indicó.
De los Santos recordó que las oficinas de SIPINNA están abiertas para coadyuvar con organizaciones civiles y puso a disposición del nuevo consejo los espacios de esa dependencia para actividades y reuniones.
También se hizo presente la representación del DIF Morelia, mediante Alexandra Martínez, en nombre del director José Manuel Álvarez. Martínez refrendó el respaldo institucional hacia VIFAC y reconoció la importancia de articular esfuerzos con asociaciones que trabajan en temas de primera infancia, maternidad y derechos sociales.
A lo largo del evento, se abordaron experiencias de atención a mujeres embarazadas, relatos del trabajo cotidiano y se emitieron agradecimientos hacia figuras como Marilú Mariscal, fundadora nacional de VIFAC, por la visión y consolidación del modelo que ha permitido operar en 25 centros a nivel nacional y uno en el extranjero.
La toma de protesta concluyó con un llamado a continuar fortaleciendo el trabajo conjunto entre ciudadanía, instituciones religiosas, organizaciones civiles y autoridades gubernamentales para garantizar entornos más seguros y dignos para las mujeres y sus hijos.
El nuevo consejo de VIFAC Morelia asumirá funciones por un periodo de tres años, conforme a los estatutos de la organización.