#COLUMNA “LA IZQUIERDA Y SU EXTRAÑA FASCINACIÓN POR EL EJÉRCITO”

 #COLUMNA “LA IZQUIERDA Y SU EXTRAÑA FASCINACIÓN POR EL EJÉRCITO”

JOSÉ ALBERTO GUERRERO BAENA

ALEJANDRA VANEGAS RODRIGUEZ.

“Las tragedias se gestan muchos años antes de que ocurran”

Elena Garro.

Reflexiones sobre el decreto presidencial en materia de la permanencia de las fuerzas armadas en la seguridad pública.

Para analizar el acuerdo presidencial que hoy se publica en materia de permanencia de las fuerzas armadas en materia de seguridad y su temporalidad debemos de partir de una premisa inicial:

¿Cuándo han estado separadas las Fuerzas Armadas de la Guardia Nacional?

Y la respuesta siempre será la misma, nunca. 

Desde el momento de la creación de este risible cuerpo de seguridad, las tareas administrativas y operativas que venían desempeñando la Policía Federal y sus divisiones, las vienen cumpliendo las fuerzas armadasdisfrazadas en un cuerpo amorfo que no tiene pies ni cabeza, ni forma de estructurarse de manera ordenada. 

Todo “el proceso” ha sido al vapor cómo en este sexenio, sin duda un monumento al desorden y al caos administrativo y operativo. Y si nos metemos a los protocolos previstos dentro del marco jurídico penal, sin duda es meternos a un pozo sin fondo.

Pero hay forma de identificar este desorden acordado desde presidencia, de maneras administrativas y operativas, sin duda este gobierno nos esta regalando unas odas a la contradicción.

Por ello, debemos dividir este aspecto desde diferentes ópticas.

RECURSOS HUMANOS.

En el campo de los recursos humanos, es decir del personal viene la siguiente arista:

El proceso de reclutamiento, selección y admisión de personal que desea ingresar a la GN, primero causan alta dentro de la milicia cómo Policía militar y después es donde viene una llamada “separación funcional” para poderlos incorporar a la Guardia, Pero siempre bajo la mirada de los militares cómo ente de donde parten todas las órdenes superiores. 

En pocas palabras el personal cuando decide ingresar a trabajar a la Guardia Nacional, ya sabe que va a ingresar a trabajar al EJÉRCITO y no a un cuerpo de seguridad pública o policía, porque todos los esquemas de selección se llevan a cabo en infraestructura de SEDENA o SEMAR, en ningún momento hay una disciplina o enseñanzas de doctrina policial, su salario proviene de esas entidades y sus tareas están más enfocadas a trabajar bajo las órdenes de los “mandos” que esencialmente son militares o marinos sin conocimiento de la seguridad pública y que han sido asignados a estas tareas.

¿Cuándo veremos a un militar o marino plegado ante las órdenes de un civil que no sea el presidente de la república?

Nunca, es una falta a su propia dignidad, disciplina y personalidad propia de los militares, por lo que imaginen si a niveles macro llevamos esta situación a una obediencia de la Guardia Nacional al Secretario de Seguridad Ciudadana. Impensable… sin lugar a dudas. 

De origen la Guardia Nacional es y su esencia es militar, no se puede hablar nunca de una “separación”que de origen nunca hubo.

FACTOR ADMINISTRATIVO

La Guardia Nacional en el discurso, se encuentraadscrita a la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana porque se suponía que era un cuerpo de seguridad pública, valga una policía. 

Este decreto que hoy se socializa, es reconocer que nunca lo estuvo y que siempre ha estado bajo el mandoy observancia de la milicia, porque no hay una distinción como tal entre la Guardia y el ejército. Si nos vamos desde la perspectiva semiótica, la imagen y uniformes son similares, la disciplina es exactamente la misma y por si fuera poco, se opera desde las instalaciones del propio ejército. 

Por otro lado, el propio comandante de la Guardia Nacional, reporta directamente las incidencias al Titular de la SEDENA principalmente, SEMAR hatomado un papel secundario ante esto, por lo que la obediencia y voluntad de la misma “corporación” esta enclavada dentro de la doctrina militar y no desde una perspectiva de seguridad pública.

Si entramos a un análisis estructural de las instituciones públicas del estado mexicano, su financiamiento y su personal, en el presupuesto de egresos de la Federación 2020 no vienen contempladas las plazas de ingreso al servicio público de la Guardia Nacional, por lo que podemos deducir que la propia guardia como tal, no tiene una personalidad independiente y con ello, insisto, no hay una diferencia como tal del ejército mexicano.

Si tu nómina, tu uniforme y tus acciones van enfocadas dentro de la doctrina militar, ¿Qué rayos te hace pensar que eres una corporación de seguridad pública?

Y en materia de infraestructura material y de servicios es el mismo tenor…

¿Porque los cuarteles de la Guardia Nacional se encuentran en las zonas militares de cada estado o las donaciones que hacen los municipios en materia de predios para los futuros cuarteles, se hacen a la SEDENA y no a la SSPC?

Sin duda nos seguimos preguntando porque un gobierno que dice ser de izquierda y de tradición democrática, hace un uso indiscriminado del ejército y sus satélites para cumplir funciones que de algún otro modo, otras dependencias del servicio público federal podrían cumplir con las formas y sentido correcto.

Por ello, seguimos insistiendo, no hay diferencia entre la Guardia Nacional y SEDENA, el acuerdo sólo nos confirma que las fuerzas armadas son quienes dictan las órdenes y los lineamientos de todo tipo en la “corporación” falaz.

OPERATIVAMENTE HABLANDO

Otras interrogantes tengo:

¿Cuándo ha estado bajo el mando de SSPC la Guardia Nacional, si todos los esquemas operativos y administrativos provienen de SEDENA y SEMAR? 

¿Cómo se supone que Alfonso Durazo o el titular de SSPC se va a coordinar con los titulares de SEDENA o SEMAR cuando no tiene el mando de la GN? 

¿Ya se adaptaron todos los protocolos de actuación para avalar el uso de las fuerzas armadas en la seguridad?

O seguiremos dependiendo de las policías locales ( las cuales han sido debilitadas en el presupuesto federal) para que hagan las veces de primeros respondientes.

Y sobre todo cuando la GN esta en territorios netamente militares… siguen engañando.

Si la Guardia Nacional es un cuerpo de seguridad ciudadana:

¿Porque están bajo la auditoria, fiscalización y observancia de sus entidades de origen y no de la entidad a la que se supone que pertenecen? 

Porque en el acuerdo se señala que se viene desarrollando un esquema de “estructura” de auditoria y fiscalización de la Guardia Nacional, pero al final se señala que quien va a observar es la fuerza de origen, es decir que los parámetros de medición y evaluación provienen de SEDENA y SEMAR.

Nunca ha habido, ni habrá una separación como tal. 

Las fuerzas armadas han estado fuera de sus cuarteles desde el año 1999 cuando varias divisiones del ejército fueron disfrazadas con uniforme policial para la creación de la Policía Federal Preventiva, posteriormente se les utilizó en el sexenio de Felipe Calderón y se reafirmó su posición operativa en el Gobierno de Enrique Peña Nieto. 

¿Por qué Andres Manuel López Obrador no iba a seguir la estela de lo mismo?

Al final de cuenta uno es el discurso de campaña y otro lo que se pusiera en práctica en el ejercicio del poder. Lo cual nos confirma que hay 30 millones de gentiles que creyeron en lo mismo. 

Y quizás peor, porque los números en nada avalan la presencia de las Fuerzas Armadas en las calles. Y la violencia no para.

CONCLUYENDO

Este acuerdo presidencial que se publica el día de hoy, es reconocer que el invento amorfo (la Guardia Nacional) no ha tenido los resultados adecuados en materia de seguridad, donde los datos que avalan su creación no le favorecen, aunque desde el gobierno siempre digan que “tienen otros datos”.

Este documento sólo confirma el fracaso de la Guardia Nacional como cuerpo de seguridad pública y si confirma que en este sexenio el ejército es el comodín que puede acomodar este ajedrez entorno al emperador.

No hay una diferencia ni distancia entre la Guardia Nacional y el ejército. 

Son lo mismo, son las mismas instituciones del estado mexicano que no pasarán por evaluación o auditoría alguna y para seguir con el engaño gubernamental de que “todo va bien”.

Hoy constitucionalmente reconocen que a Guardia Nacional no sirve y que el auxilio que deben de prestar las Fuerzas Armadas (previsto de manera transitoria) es un hecho. Otro más de los fracasos y revolturas presidenciales que sólo han servidor para engañar a quienes son los clientes de cada 3 y 6 años en elecciones y que al parecer no tienen memoria.

Por ello es muy extraño y raro que un gobierno de izquierda tenga esa extraña fascinación por las fuerzas armadas.

Esto apesta demasiado a autoritarismo.

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Redaccion Indicio Michoacán

Redacción

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