Más Que Una Corona… ¡No Olvides el Bloqueador!

Ya estamos a nada de que entre la primavera, ya comenzamos a sentir el calorcito y los rayos del sol más fuertes en esta estación del año.

Nuestro rostro sufre cuando los rayos ultravioleta nos dan de frente y sin ninguna protección, por eso, en esta columna te recuerdo el importante uso del bloqueador solar diariamente (aunque no te encuentres en la playa).

El protector solar es considerado como uno de los productos más importantes para el cuidado de nuestra piel, debido a sus múltiples beneficios como ser capaz de prevenir el envejecimiento prematuro, las manchas en la piel y algunas enfermedades.

Su uso es recomendable a partir de los 6 meses de nacimiento con una frecuencia de 3 veces al día, aunque las personas que tienen exposición solar fuerte a pantallas de dispositivos digitales, deben usarlo cada 3 o 4 horas al día.

Además, se recomienda el uso de los que cuentan con protección solar por encima de 30 y con protección rayos UVA, los cuales se encuentran en la luz visible, infrarrojos, luz azul y las pantallas digitales de computadoras, celulares y tablets.

La prevención del envejecimiento cutáneo, la aparición de manchas, pecas, líneas de expresión y además de evitar el cáncer de piel (que está inducido por luz solar como artificial), son algunos de los múltiples beneficios con los que cuenta el protector solar.

El protector solar ya es el punto clave para un buen maquillaje, una buena rutina de skincare, cada vez más personas lo usan diariamente y se ha ido desapareciendo el hábito de utilizarlo solo en verano.

Incluso a través de redes sociales ya varios especialistas en el tema han salido a declarar que el proyector solar es lo mejor que podemos hacer por nuestra piel, y que incluso cumple mejor función que muchas cremas o productos con un precio excesivo en el mercado.

Es importante mencionar que si vas a exponerte al sol debes aplicar protector solar 30 minutos antes de hacerlo y repetir la acción cada 2 o 4 horas.

No debemos olvidar aplicarlo en las zonas como las orejas, labios, entorno de ojos, cuello y manos. Y recuerda que si presentas enrojecimiento, ardor o dolor en la piel después de la exposición al sol sin protección, existen muchos remedios caseros, pero siempre será mejor consultar a tu médico.