Cienfuegos: justicia o impunidad por Julio César Calderón
- OPINIÓN
Redaccion Indicio Michoacán- 0
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En días pasados el General Cienfuegos, quien fue secretario de la Defensa Nacional (Sedena) en el sexenio de Enrique Peña Nieto, arribó a México después de que la justicia estadounidense retirara los cargos en su contra. Lo anterior fue gracias a la intervención del Gobierno de México en colaboración con la Fiscalía General de la República, pues se solicitó al país del norte que se pudiera juzgar al militar en México. Sin embargo, ¿fue esta una decisión acertada?.
El caso del General Salvador Cienfuegos muestra la debilidad institucional de la autoridad civil y el poder que tiene el Ejército sobre el Ejecutivo, ¿será que hubo presiones por parte de las fuerzas armadas para la liberación de las redes estadounidenses?, ¿por qué el ejército no se deja juzgar?…
Lo que queda claro es que las investigaciones en contra del General Cienfuegos se llevarán a cabo en México, aunque la Fiscalía General de la República no tiene la facultad de procesarlo, la Procuraduría Militar sí, el problema reside en que lo estarán juzgando los mismos que en algún momento fueron sus subordinados lo cual pone en duda la rectitud del proceso.
Cienfuegos es una pieza clave en el combate a la corrupción y la impunidad en nuestro país, la información que posee puede abrir carpetas de investigación en contra de muchos funcionarios públicos de alto nivel, no solamente de nuestro país si no de los Estados Unidos pues son conocidos los métodos de investigación ejercidos por la DEA y la CIA, violando todo principio de soberanía.
El canciller Marcelo Ebrard aseguró que el proceso en contra del exsecretario será bajo estricto apego a la ley y que se blindará la investigación para sea efectiva. Pero, históricamente hemos visto como la justicia mexicana tiene el sello de impunidad y corrupción. ¿Cuántos casos de matanzas a manos del ejército han quedado impunes?, no olvidemos el movimiento estudiantil del 68, el halconazo en el 71, la masacre en Tlataya, Aguas Blancas, Acteal y desde luego Ayotzinapa.
La sociedad mexicana exige alto a la impunidad, mientras los órganos encargados de impartir justicia sigan resguardados por actores del viejo régimen, seguirán cuidándose las espaldas, tumbando procesos y poniendo trabas para llevar a la rendición de cuentas a todos aquellos que desde el poder amasaron inmensas fortunas, fueron cómplices de masacres y autores de la desgracia que actualmente vivimos a consecuencia de sus malas administraciones.
