¿Por qué siempre llega tarde la Policía Municipal de Morelia? Claro, si es que llega…

Utopías de una coordinación intermunicipal en seguridad.

Y aclaremos desde el inicio, esto no es culpa de los policías que están cumpliendo simplemente las órdenes de un mando que se encuentra perdido en una zona de confort, comodidad e incluso tomando posición electoral.

Nada más triste, ver a la Policía, haciendo propaganda electoral de unos funcionarios que sólo les han lastimado sus derechos humanos laborales… pero esto es harina de otro costal y de otras instancias.

Hoy en día, hay una serie de quejas ciudadanas sobre la nula reacción policial de la corporación municipal, donde por cierto se culpa a los policías de tales acciones. Sin dudarlo, a veces el desconocimiento que tiene la población sobre las acciones que se realizan desde los cuerpos de seguridad, nos lleva a emitir juicios muy severos sobre los uniformados, sin tomar en cuenta que ellos reciben las ordenes de trabajo desde un Centro de Comando operado por el Gobierno estatal, que sin duda hará que su propia Policía trabaje y brille su despliegue territorial, quitándole de encima esa responsabilidad que por ley le corresponde a la Policía Municipal de Morelia y a la de los municipios conurbados.

Ante esta perspectiva que ha convertido la “coordinación” en subordinación de la Policía Municipal a las otras instancias de seguridad (Policía Estatal y Guardia Nacional), los mandos de la corporación local, ya deberían de haber diseñado algún esquema de recepción de denuncias eficientes y de investigación que pudieran aportar las posibilidades para reaccionar de una forma oportuna y dejar de ser los “apoyos” de las otras corporaciones. Sin duda la Policía Municipal de Morelia, en los términos futboleros, debe jugar de local en su territorio.

Pero… ¿Qué es lo que se necesita?

Definir una serie de objetivos que nos ayuden a que se pueda eficientar la operatividad policial y redefinir el esquema de inteligencia para procesamiento de datos y de despliegue de ordenes de trabajo, Sin duda el trabajo sistematizado, debía llevar a otros horizontes el esquema policial y no a ser la pilmama de las otras corporaciones.

Al parecer, a nuestros mandos policiales, se les han olvidado diferentes aspectos que deben de tomar en cuenta para tratar de hacer más ágil la labor policial en materia de investigación y eficiencia que lleven como resultado final la obtención de resultados.

 

Los factores de desarrollo son los siguientes:

1. Definir un proceso de generación de inteligencia policial, identificando los aspectos más relevantes para la obtención de información y generación de diagnósticos que nos ayuden a una mejor toma de decisiones.
2. Buscar que, de acuerdo a las posibilidades de personal y perfiles, mejorar la obtención de información, de preferencia con un modelo propio y con base en la experiencia territorial que tenga el personal.
3. Proponer una hoja de ruta que pueda enlazar no solamente a la Policía de Morelia, sino a los municipios conurbados de la Zona Metropolitana de Morelia, para poder compartir información y estudios de manera interinstitucional, debido a que la riqueza de información municipal, nos ayudaría a coordinar la operatividad y a la investigación.

Es por ello, que ante la falta de definición de rutas de trabajo de investigación y de una autonomía operativa – sin que esto suene a rompimiento u ostracismo operativo-, se debería de desarrollar un sistema intermunicipal de inteligencia, siempre en concordancia con la autoridad estatal, derivado de ese famoso “Operativo Michoacán” donde al parecer quien absorbe el mayor peso de la operatividad es la Secretaría de Seguridad Pública del Estado y donde solo queda la pantalla de las acciones de la Guardia Nacional.

Sin duda es un reto, porque no ha habido cabida para que las policías municipales de la Zona Metropolitana de Morelia, puedan desarrollar acciones coordinadas, de inteligencia y si en cambio, hay una intromisión de trabajo descoordinado y sin ningún tipo de orden. Es preciso señalar que las Policías Municipales deben de tomar el control del fuero que les corresponde, hacer investigación de forma cotidiana y plasmar ese tipo de trabajos que puedan servir para generar política pública, toma de decisiones y principalmente el aprovechamiento de las habilidades del personal, que rara vez en esta demarcación, se ve que los mandos tengan un conocimiento profundo de los policías a su cargo.

Las omisiones que podemos analizar de todo este entramado, es indispensable subsanarlas, porque ante la falta de acciones policiales que posicionen a la Policía Municipal como la más importante y el pilar del sistema de Seguridad de Michoacán, probablemente se seguirá ofertando el descontrol operativo, administrativo y financiero llamado “Mando Único”.

Las áreas por intervenir o crear para eficientar este sistema serían las siguientes:

1. Capacitar y hacer un requisito indispensable que el policía llene el Informe Policial Homologado (IPH) con todos los hechos obtenidos via bitácora y observación participante. Es toral que ninguna referencia geográfica o de datos de las víctimas se olvide.
2. No hay un sistema protocolario para la generación de juntas o redes vecinales y con ello hay muy poca información útil que se puede obtener de las mismas, donde se puede conocer las causas y factores que generan los delitos en su demarcación.
3. Al parecer no se han homologado las metodologías de investigación del delito, compartiendo las bases de datos, mapas de calor y tampoco se han dado a la tarea de generar redes de puntos críticos de incidencia
4. Con la información obtenida con las bases de datos, mapas de calor y los estudios de terreno realizados, puede generarse soluciones para la atención de las causas que originan las conductas patológicas y con ello poder diseñar estrategias de seguridad focalizadas o como yo les he llamado “trajes a la medida”.
5. Al parecer las reuniones vecinales, sólo se quedan en eso, en reuniones sin mayor trascendencia. Lo más relevante, es dar seguimiento a los acuerdos realizados en esas juntas y poder atender los llamados urgentes derivados de esas redes creadas exprofeso y que se pueden generar de forma institucionalizada, la información para atender sus denuncias de forma inmediata. Mientras no haya conocimiento de terreno y por otro lado tampoco haya un mecanismo de seguimiento, seguiremos en las mismas.

Si no subsanamos estas circunstancias, sin duda las corporaciones municipales seguirán siendo las mas inoperantes, debido a que aun cuando cuenten con el personal capacitado y con la mejor intención de trabajar, si no se tiene bien definido el esquema de obtención de información y de una adecuada reacción, seguirán siendo dejadas a un lado dentro de los planes y estrategias de seguridad.

Aunque claro, seguimos pensando que esto es una utopía, porque mientras hay quienes legítimamente estamos preocupados por el devenir de la ciudad, los funcionarios de seguridad están más preocupados por buscar una posición política que por estar al pendiente de vigilar nuestra ciudad capital.

 

JOSÉ ALBERTO GUERRERO BAENA

Coordinador Estatal en Michoacán de la Internacional Police Association (IPA)

Delegado Estatal en Michoacán de la Red Nacional de Profesionistas en Seguridad Pública. AC.

Coordinador del Observatorio de la Guardia Nacional Capítulo Michoacán.

Académico integrante del Observatorio de la Guardia Nacional.

Doctorante en Política Criminal por la Universidad de Sussex, Reino Unido

Investigador del Foro Latinoamericano de Antropología del Derecho.

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